¿He sido el espejo y me dejas ser tus ojos para permitirme observarte desnuda?
¿En qué lugar de la noche te espero para que te fugues con mi palabra?
¿Cuál de tus silencios nace a partir de mi existencia en tu imaginación y tu memoria?
¿Cuándo tus palabras tienen el sabor de mi nombre, por qué te sientes tímida?
Hay un lugar en tu cuerpo desde el cual inicias el recorrido de tus formas. ¿Ese lugar es tu boca, o tu cuello?
¿Me presientes en la noche antes del sueño, o en la mañana antes de levantarte de la cama?
¿Esperas mi mirada amplia sobre tu piel y mis manos ágiles con ella?
¿Concederás a mi boca las rutas abiertas de tu cuerpo que recorren tus manos bajo la ducha?
¿Detienes el beso y lo conservas en tus labios del mismo modo en que me guardas una porción de tu comida?
¿Hay una cúspide donde contemplas el éxtasis izado por mi nombre?
¿Te sonrojas en silencio apreciando tus imaginaciones conmigo?
¿Soy una historia viva en tus pensamientos nocturnos?
¿Es inevitable la conjugación de tus formas con las mías?
¿Pones tus manos en sitios exactos de tu cuerpo y juegas a adivinar en cuál de ellos detendré extensamente mi boca?
¿Cedes parte de tu sueño a la imaginación para dormirte conmigo?
¿Cuándo vendrás a mí del mismo modo en que llegas a mi memoria?
¿Te sorprende una sonrisa cuando me nombras?
¿Soy como el agua y el aire, ningún lugar me es ocultado?
¿Saben de mí tus manos y tu boca, tus brazos y tu cuello, tu espalda y tus rodillas?
¿Puedo ser tinta, verso, vocal y tilde, consonante y verbo en tu cuerpo?
¿Tú serías montaña, yo sería río, tú serías pradera y yo tierra?
¿Giras hasta el borde de la cama y tiemblas suponiendo el espacio abierto llenándose de mi cuerpo?
¿Me has concedido temblores silenciosos de tu cuerpo?