Le dice la noche al espejo, solo para que lo sepas, tú, nadie más, y guardes el secreto, a veces extendemos murallas, alquilamos nieblas espesas, sembramos ruidosas tormentas y labrados caminos en espiral que dan vuelta a sí mismos, todo eso para que los hombres supongan que hay algo oculto afuera y vayan con su curiosidad a descubrirlo, nuestro propósito es que salgan de sí y no vean que toda la verdad la llevan dentro.
