Roto el mapa, no desaparece la geografía. Borrada la fotografía, no se elimina el paisaje. Desacreditada la historia no se olvidan los hechos. Averiados en la vejez, no desconocemos la infancia. Separados del ombligo, la fuente sigue siendo el útero. Aún sin lecturas mágicas, hay una ficción en las cartas. En las líneas de mis manos, lejos de tu piel, crece un vocabulario de caricias.

👍👍👍